viernes, 14 de abril de 2017

5 hechos sobre el Cerebro que explican vuestro comportamiento extraño

Wired.co.uk
Nuestro cerebro es imperfecto. Nos olvidamos de los nombres de las personas, no podemos dormir por las noches, no nos damos cuenta de las cosas obvias... El neurocientífico Dean Burnett, en su fascinante libro: "El (inestimable) cerebro idiota", explica por qué tenemos tanto caos en la cabeza.

Dean Burnett
Doctor en neurobiología, conocido por su sentido del humor. Lleva una columna en The Guardian, donde explica de forma divertida los procesos que tienen lugar en el cerebro de las personas.

1. Por qué nos imaginamos cosas horribles
Tal vez todo el mundo sea capaz de recordar el caso, cuando una vez por la noche le pareció como si un ladrón se introdujo en la habitación, pero que en realidad resultó ser un viejo abrigo colgado de la manija de la puerta. O sombras en las paredes que recordaban ser monstruos horribles. Pues bien, para ello nos prepararón los millones de años de evolución.
Como en nuestro alrededor existen muchos peligros, nuestro cerebro reacciona inmediatamente frente a cualquier amenaza potencial. Por supuesto, a Ud. le parecerá que es tonto saltar al ver a su túnica. ¿Qué peligro representa? Pero sólo nuestros antepadados más cautos, que reaccionaron incluso ante la amenaza inexistente, fueron capaces de sobrevivir.
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"Para nuestro cerebro es característico el enfoque de que "Al que se cuida, Dios le protege" (o que "Es mejor prevenir que lamentar"), por lo que a menudo experimentamos temor en situaciones donde, para esto, no hay ninguna razón". (-Dean Burnett)
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El miedo ha ayudado a la humanidad a desarrollar una increíble respuesta de "lucha o huye". En esos momentos, el sistema nervioso simpático moviliza las fuerzas del organismo. La persona empieza a respirar con más frecuencia para que en la sangre haiga más oxígeno, siente la tensión en los músculos, obtiene la carga de adrenalina y se vuelve más vigilante de lo habitual.
El problema consiste en que la reacción de "lucha o huye" se activa antes de que este claro si será necesaria o no. Y en esto hay lógica: porque es mejor prepararse para un peligro inexistente, que dejar pasar la realidad.

2. Por qué no podemos recordar para qué se entró en la habitación de al lado
Esto es una situación familiar: cuando Ud. decidídamente corre hacia la cocina, cruza el umbral y ...se olvida, para qué, en sí, necesitaba estar aquí.
Todo se debe a las particularidades del funcionamiento de la memoria a corto plazo. Este tipo de memoria está constantemente en acción. Nosotros, cada segundo pensamos en algo, la información llega al cerebro a una gran velocidad y casi inmediatamente desaparece. Todos los nuevos datos se almacenan en forma de patrones de actividad neural, y esto es un proceso muy complejo.
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"Esto es como si Ud. elaborara una lista de compras en  la espuma de su capuchino. Técnicamente esto es posible, ya que la espuma por unos instantes puede mantener los contornos de las palabras, pero en la práctica esto no tiene sentido".
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A veces, en este sistema no fiable se producen fallos. La información puede, sencillamente, perderse, por lo que uno se olvida para qué fue (hacia la habitación). A menudo esto se debe al hecho de que la persona piensa demasiado acerca de cualquier otra cosa. El volumen de la memoria a corto plazo, es tan sólo de 4 unidades que se almacenan no  más de un minuto. Por eso es que no hay nada de sorprendente en el hecho de que la nueva información sustituye a la antígua.

3. Por qué reaccionamos mal a las críticas
Supongamos que Ud. ha cambiado el estilo de su corte de pelo, y cuando llegó a su trabajo, 10 colegas suyos le hicieron un cumplido, pero uno de ellos le miró con mala vista. ¿A quién más le recordará? Aquí, incluso no es necesario adivinar, porwue para nuestro cerebro la crítica es mucho más importante que los elogios. Esto ocurre por varias razones.
Cuando escucha una observación o nota una reacción negativa, Ud. experimenta estrés, aunque sea pequeño. En respuesta a este evento comienza a generarse la hormona cortisol. Esta hormona no sólo está implicada en las situaciones de estrés, sino que además provoca la reacción de "lucha o huye", y esto es una carga pesada para el cuerpo.
Pero esto se debe no sólo a la fisiología, sino también a la psicología. Como bien se sabe, para la alabanza y la cortesía, estamos acostumbrados. Pero como la crítica no es una situación típica, por esta razón es que nos llama la atención. Además, nuestro sistema visual inconscientemente busca amenazas en el entorno. Por lo que nosotros probablemente sentimos el sentimiento negativo de la persona, que de los colegas sonriendo.

4. Por qué dudamos de nuestras capacidades
Las personas inteligentes a menudo suelen perder las disputas de los tontos, porque estos últimos se sienten mucho más seguros. En la ciencia, este fenómeno se conoce como el "Efecto Dunning-Kruger".
Los psicólogos Dunning y Kruger realizaron un experimento. Ellos les dieron a las personas participantes voluntarias una tarea, para después preguntarles: cómo aquellos, en su opinión, los hicieron. Se reveló un patrón inusual. Los que realizaron la tarea mal, estaban seguros de que los habían hecho muy bién. Mientras que los que realizaron bien la tarea, dudaban.
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"Dunning y Kruger plantearon la hipótesis de que la gente estúpida no sólo no tienen la suficiente capacidad mental. También carecen de la capacidad de reconocer su extrema insuficiencia".  
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Las personas inteligentes constantemente aprenden algo nuevo, por lo que no se comprometen a afirmar sus certezas con el convencimiento del 100%. Porque ellos entienden que en cualquier asunto todavía hay mucho que estudiar. Recuerde el famoso dicho de Sócrates: "Sólo sé que nada sé". 
La persona necia no sufre de estas dudas, por lo que a menudo gana las disputas. Ellos no vacilan en lanzar afirmaciones falsas y dar su opinión personal como una verdad absoluta. 
Nuestro cerebro es extraordinariamente bueno en adivinar las expresiones faciales y en reconocer las emociones. Para esto requiere de una mínima información. Un ejemplo típico son los emoticones. Que en símbolos son: :); :(; :O que rápidamente se les puede reconocer con la alegría, triteza y sorpresa, a pesar de que sólo son puntos y guiones. 

5. Por qué no podemos ocultar a los demás, lo que pensamos realmente
Algunas personas son buenos para ocultar sus eociones, como los jugadores de póquer. Pero incluso ellos no pueden hacer nada con las expresiones involuntarias. Porque se rigen por una estructura antígua de nuestro cerebro: el sistema límbico. Por eso, cuando tratamos de ocultar nuestras verdaderas emociones por cortesía, los que nos rodean de todos modos notan, cuando nuestras sonrisas son sinceras y cuando no.

Nuestro cerebro es a menudo comparado con una computadora super-moderna. Pero a ud. sin duda no le gustaría la computadora que, a su discreción, cambia o elimina los datos de su memoria. Si Ud. desea saber, cuando vuestro cerebro falla y le engaña, le recomendamos no posponer la lectura del libro: "El inestimable cerebro idiota" de Dean Burnett. Porque a ud. le espera un relato fascinante de los últimos avances en la neurociencia. 
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Por Mauritz,

(Ref.: Lifehacker.ru; Factroom)



 


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